En el centro histórico de La Habana existe una encrucijada privilegiada para la promoción del arte joven de la isla. Entre las calles Monserrate, O’Reilly y Villegas se traza una especie de «Triángulo de las Bermudas» habanero. Una vez que entre, no podrá zafarse de esa ruta que se teje entre los sitios más turísticos, pero también le muestra el arte de barrio.
Este recorrido requiere atravesar muchas calles de La Habana Vieja. Las altas temperaturas de la isla exigen que se resguarde. Sugiero que lleve protector solar, un sombrero y gafas para el sol. También incluya una botella de agua, vista ropa y calzado cómodos… y a caminar.
Una ruta para descubrir diez sitios habaneros repletos de arte joven
Le propongo una ruta. Quizás tenga la suya propia, pero en esta que le formulo se incluyen los diez lugares, en La Habana Vieja, donde se exponen las actuales tendencias del arte cubano con mayor auge. Téngala en cuenta.
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The-Merger Art: en espacio reducido el arte crece
Al costado del Museo Nacional de Bellas Artes, en la calle Monserrate, divisará esta pequeña galería privada. La identificará fácilmente porque un cartel verde cubre la parte superior de la entrada y lleva grabado en letras blancas el nombre del lugar: The-Merger Art.
Ya en su interior un ambiente climatizado y seductor le abraza. Apenas en una salita de 2 x 2 metros aparecen un montón de obras de arte, todas de autores jóvenes. Las muestras son transitorias, pero siempre se sorprenderá con los estilos que defiende el lugar y si gusta podrá adquirir un pedacito del arte cubano más reciente.
Al salir, le recomiendo que continúe caminando por la calle Monserrate, pasará frente al Edificio Bacardi, uno de los edificios más bellos de La Habana y en la esquina de O’Reilly doble a la izquierda.
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Arte en el barrio y barrio en el arte
Cuando camine por la calle O’Reilly es muy difícil que no perciba una esquina pintada de rojo. Los graffitis en sus paredes anuncian que ha llegado a la Galería de Arte Arqueológico.
Se trata de un lugar singular, exactamente ubicado en la intersección de O’Reilly y Villegas. Si mira a su alrededor descubrirá un paisaje muy poblado de edificios antiguos y en sus balcones cuelgan ropas recién lavadas. Sin dudas, está en las entrañas de un barrio habanero.
La galería es un poco intimidante, pero la experiencia es interesante. Su interior es oscuro, lleno de carteles con colores llamativos y objetos prehistóricos como cuernos y pieles de animales. Usualmente en su interior se tocan cantos típicos de la religiosidad afrocubana.
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Tabarish, un bar amigable
Le recomiendo hacer una parada para repasar las emociones vividas hasta este momento. En la esquina, O’Reilly # 465, entre Villegas y Aguacate, frente a la galería de arte arqueológico está el Bar Tabarish.
La especialidad de la casa es la comida rusa, aunque si llega a visitarlo observará que la identidad del lugar es fruto de la rica unión de dos culturas en un producto cubano. Pruebe las ensaladas y los tragos de rones. En ese momento lo agradecerá.
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Factoría Habana
Continuamos bajando por O’Reilly y hallará otra galería importante de La Habana. La llamada Factoría Habana es de las más grandes de la ciudad, por estar en el espacio de una antigua fábrica.
Su misión es la promoción del arte experimental cubano y foráneo. Para mantenerse actualizada en lo último que acontece, organiza talleres y conferencias y realiza exposiciones colectivas a las que asiste todo el público interesado. Un ambiente verdaderamente artístico en medio de una antigua zona citadina.
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Casa – Librería Tula
Entre la muchedumbre de La Habana Vieja, en la calle Villegas # 258, una casa privada abre sus ventanas. Solo un modesto cartel colgado en la puerta le indicará el camino.
Asómese y descubra la Librería de Tula. El sitio es como un viejo botín del tesoro, escondido en tierra de nadie. Atrapado por el olor de viejos libros descubrirá la mejor colección de carteles de la cinematografía nacional, solo superada por la exhibida en el Instituto Cubano del Arte y la Industria Cinematográfica (ICAIC), en el Vedado.
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Clandestina
Siga en línea recta y la calle Villegas le llevará directo a Clandestina. Entre las calles Teniente Rey y Muralla se ubica la única tienda privada que diseña moda cubana. Es una iniciativa bastante reciente que ya cuenta con muchos seguidores.
Los diseñadores que trabajan para la marca «Clandestina» son jóvenes y talentosos. Han realizado colecciones que versan sobre temas afines a la sociedad cubana actual y por eso ganan en popularidad.
Siempre tiene en exhibición camisetas con carteles ocurrentes que utilizan los dichos y refranes más cubanos. Con seguridad se antojará de algo en venta y lo llevará de regreso como amuleto que le recordará su estancia en La Habana.
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El Dandy Bar-Galería, en medio del camino
Si desea otro descanso podemos hacer una nueva parada. Específicamente en Villegas y Teniente Rey el Bar-Galería El Dandy es una opción genial, sin necesidad de desvío.
Este lugar es multipropósito: mientras degusta su pedido puede deambular entre antigüedades, pequeñas instalaciones, pinturas y fotografías colgadas en las paredes. Un diminuto sitio donde se perciben novísimos estilos artísticos de la joven vanguardia cubana.
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Ona Galería, espacio comunitario para interactuar
En Oficios # 307B, entre las calles Sol y Santa Clara, se encuentra dicha galería comunitaria. Se distingue por exhibir esculturas, pinturas y grabados de artistas cubanos.
Ona Galería ha devenido en una estupenda propuesta cultural comunitaria, porque en los últimos tiempos organiza actividades de pequeño formato. El objetivo fundamental es contribuir a la integración social del barrio.
Por esta razón, todo visitante es bienvenido porque la transformación requiere del intercambio cultural entre artistas locales y público. Ya lo sabe, visite este barrio capitalino y comparta con su gente.
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La Marca, como una nueva tendencia del arte joven en la Habana Vieja
En la calle Obrapía # 108C, entre Oficios y Mercaderes, está situado un taller – estudio de tatuajes. Es un negocio privado con muy buenas ofertas y personal preparado. Cuenta con todas las condiciones para este tipo de actividad.
La Marca ha progresado como negocio al punto de convertirse en un impulsor de la carrera de jóvenes artistas. En este sentido, usa parte de sus fondos para el lanzamiento de becas de creación, ya sean de las artes visuales o la música.
Fundamentalmente en las noches organiza peñas culturales con la participación de artistas. La entrada del público es gratuita y realmente el ambiente es agradable. Mi consejo es que visite el lugar y conozca su variada programación cultural.
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Galería – Taller Gorría
En el folklórico barrio de San Isidro, entre las calles Picota y Compostela, en el # 214, se localiza el Taller Gorría. También funciona como galería privada y está dirigido por Jorge Perugorría, famoso actor cubano protagonista de la película «Fresa y Chocolate», ahora devenido en pintor.
Es considerado un proyecto cultural para reunir a artistas nacionales e internacionales, en Taller Gorría puede dialogar sobre el arte y sus vertientes. Es por eso que varias veces al año desarrolla talleres y conferencias.
Además, realiza exposiciones en diferentes formatos desde los más clásicos hasta los más novedosos. Cuando se está dentro de «Gorría», se siente la intención de rebasar lo tradicional porque es una propuesta desafiante.
Obtenga en La Habana el arte que desea
En todos los tiempos los artistas cubanos han sido reconocidos por sus incursiones. Hoy día aumentan las iniciativas privadas para encausar, por buen camino, los trabajos de los jóvenes creadores.
Los lugares mencionados le ofrecen mayor oportunidad de interactuar con las obras y, por supuesto, también comercializan el arte exhibido. Elija su estilo y llévelo consigo.
