La Ciudad de la Habana es una ciudad inusual, algunos dicen que maravillosa… Para mí lo es. Espero que seas tu el que la juzgue una vez que la visites.
La diversidad de estilos arquitectónicos presentes en la capital Cubana es una de sus características más distintivas. Es frecuente encontrar Art Decó en La Habana junto a otros múltiples estilos arquitectónicos que coexisten en un mismo espacio.
Resultado de su variopinta historia se puede encontrar una casa quinta (estilo neoclásico), cuyo interior esté ricamente decorado con suntuosos espejos, escaleras de mármol rosa, esculturas helénicas fabricadas con material de Carrara, cerca de una tipología ecléctica en cuya fachada se aprecien tres pisos y ninguno de ellos guarda relación entre sí.
Y es que La Habana es una ciudad de mixturas donde conviven, gracias a la supervivencia, casi todos los estilos arquitectónicos que la han engalanado en algún momento de su devenir. Uno de los mejores conservados, y con un número importante de ejemplos, es el Art Decó.
Art Decó en la Habana, los inicios…
Ubicado cronológicamente entre 1920 y 1940, su inserción en el contexto cubano, y en particular, el habanero se localiza hacia finales de la década del 20 a través de publicaciones extranjeras que circularon en el país, de estudios cursados en Estados Unidos y de planes de enseñanza de artes. Son tan evidentes sus particularidades estilísticas que el simpatizante con el movimiento no dejará de sonreír cuando descubra los ejemplos.
Lugares emblemáticos
López Serrano (calle L, esquina a 13, Vedado)
Este edificio de apartamentos data de 1932 y fue considerado en su momento como nuevo tipo de vivienda que tuvo en cuenta elementos de confort como garaje, correos, peluquería, entre otros servicios en su planta baja.
El carácter ascensional de la estructura es su principal distinción; sin embargo, otros aspectos como la geometrización de la decoración y el predominio inalterable de la línea recta lo convierten en uno de los ejemplos más citados del movimiento.
Hotel Nacional de Cuba (calle 0, esquina 21, Vedado)
Hotel insigne de la capital, el Hotel Nacional de Cuba perpetúa el empleo de la línea recta, aunque ha sido mucho más reconocido por sus ricos interiores, también decó, en los que el pasado y el presente coexisten en un contexto conservador y moderno. Y es que el esplendor en los interiores también es significativo de este período.
Un ambiente decó guarda cuidado en el diseño de cada una de sus partes: el trabajo geométrico puede ser contemplado en sus herrajes, lámparas, pasamanos, en los arcos escalonados, el diseño de los techos, en el empleo de mármoles con diferentes tonalidades, entre muchos otros.
Edificio Bacardí (Habana Vieja)
Considerado como el máximo exponente del código Art Decó en Cuba, este edificio luce todos los atributos propios del movimiento: presencia de línea recta, torres que rematan la construcción buscando ascender, diseño interior en función de lo lineal…, pero además exhibe la aplicación del color. Los contrastes logrados por el empleo del color estuvieron presentes en buena parte de los exponentes y el edificio Bacardí es uno de ellos.
Lamentablemente se puede disfrutar en muy pocos, casi siempre en interiores y a partir de su conservación en el diseño que acompañó a la estructura (lampistería, vidriería, aplicado al herraje, azulejos, etc.). Curiosamente se conserva en esta edificación un precioso elevador decó, “casi” único en el país.
Cines y Teatros
En cada rincón de La Habana podrá disfrutar de soberbios ejemplos de estas tipologías. Afortunadamente muchos de ellos aún se conservan. En ellos la horizontalidad va a preponderar a partir de la funcionalidad de los mismos.
El estilo Decó fue muy utilizado en la construcción de estos por la relación entre realidad y ficción, de ahí que apostaran por crear un ambiente atmosférico tratando de dar la sensación de estar a cielo abierto. Sus interiores se conservan muy poco, pero el exterior atesora los elementos distintivos del movimiento. Un buen ejemplo para disfrutar es el Cine Arenal (calle 41, esquina a 30, Playa).
Art Decó y La Habana – Idilio Eterno?
El paso de los años, el implacable, unido a la falta de atención y mantenimiento ha convertido a muchos de estos ejemplos en construcciones ausentes de esplendor y lujo. Sin embargo, emerge su grandiosidad en medio de una ciudad que da cabida a todos sin distinción de edad o estilo.
Es el Arte Decó habanero una verdadera joya del pasado. Aún en el siglo XXI se muestra elegante, imponente y orgulloso de hacer voltear la mirada de todos cuantos gustan de apreciar un particular momento de la arquitectura.
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