Debes dejar todo listo para emprender tu aventura en tierras cubanas, por ello, qué mejor manera que conociendo las expresiones típicas cubanas y familiarizándote con ellas.
El español es un idioma tan complicado como la mayoría de las lenguas romances que hoy se hablan en el mundo. La variedad sintáctica, de significados y connotaciones de todo tipo que posee el español, lo hacen muy rico y a la vez, difícil para el que desee aprenderlo. Si es así con el idioma, imaginemos lo que sucede con sus variantes en cada región o país en que se habla.
Una importante zona lingüística en el mundo mantiene el español como lengua madre, pero como toda lengua, pasa por momentos y procesos en diferentes zonas y contextos. Te percatarás de que el acento y la pronunciación de los españoles son diferentes a la de los argentinos, los mexicanos o los puertorriqueños, por ejemplo. Y es que cada país asienta normas que se mantienen o cambian dependiendo de muchos factores.
El caso cubano no es diferente, y sucede con muchos visitantes, que aunque hablen español, les es difícil entender a los cubanos. Entre muchos otros elementos, la causa de que esto suceda es que el cubano ha asumido un sinnúmero de frases y llamados cubanismos, con los que se comunica de manera natural, en cualquier conversación. La mayoría de estas frases están relacionadas a hechos concretos, leyendas urbanas o préstamos de otros idiomas que se han utilizado con diferentes sentidos, a veces irónico o sarcástico, hasta llegar a la actualidad.
Algunas frases para poder entender mejor a los cubanos
Como ya dijimos, son muchas esas frases que marcan la cotidianidad y el tono coloquial con el que los cubanos se comunican. Veamos algunas que pueden servirte si te encuentras de visita en el país y no quieres perder el hilo de la conversación.
Saludos, despedidas
Comenzamos con algunas frases con las que se saludan o despiden los cubanos de cualquier nivel intelectual o profesional.
Para saludarse el cubano es muy expresivo en general, así que éstas frases puedes escucharlas vociferadas de una esquina a otra si se trata de dos personas que se ven desde cierta distancia:
«Asere, ¿qué bolá?» Es la típica frase para decir: «Hola, ¿cómo estás, todo bien?», aunque hay otras variantes como «¿qué vuelta?» más bien referido a qué hay de nuevo con la persona a la que saluda.
Para despedirse puedes escuchar también «chao pescao», refiriéndose a «adiós o hasta luego», o «vamo echando», cuando un grupo se despide de un lugar. En medio de una conversación es habitual «ño», que es una especie de interjección que indica asombro. A veces los más jóvenes para disculparse utilizan «mala mía» como «lo siento, fue mi culpa».
La gente conocida o no, muchas veces se llaman como «brother, paisano, ecobio, tigre, consorte» y hasta en términos más cercanos como «mi niña, mi hermano(a), mi amiguito(a), mi vida, mi amor». Así que aunque no te conozcan, es posible que cuando preguntes una dirección te digan, por ejemplo: «no sé, mi vida», refiriéndose a muchacha(o) o chico(a). Incluso, hay tendencias más modernas, utilizadas sobre todo por los jóvenes como «papi, papa, mimi, mima, mama», para indicar la persona.
Frases útiles para andar por las calles
Es importante que el visitante sepa que en Cuba a los taxis se les dice almendrones en referencia a la forma de los coches americanos que estuvieron de moda en los 40 y 50; así que «coger un almendrón» equivale a «tomar un taxi» y el «botero» es el taxista. Asimismo, a los automóviles les dicen «carros», a los autobuses «guaguas» y a sus choferes «guagüero». «Arranca chofe» es la expresión que se utiliza para decirle al conductor del auto que ya puede encenderlo y partir.
Otro consejo útil es el referido al dinero. Entre cubanos se entienden perfectamente, lo que sucede es que llaman de manera indistinta al dinero como peso (que puede ser CUC o CUP), fula, dólar, chavitos, mony, baro, estilla, astilla, pasta; lo importante es que pregunte bien antes de comprar algo.
También utilizan términos muy genéricos para referirse a los extranjeros como «gallego» para los españoles, «yumas» para cualquier foráneo, «gringo» para los norteamericanos o «chinos» para cualquier asiático.
Existen muchas frases de todo tipo
«Tremendo arroz con mango» cuando se da algún tipo de enredo. «Ponte las pilas» es una frase de ánimo para expresar a alguien que se levante o se anime a hacer algo. «Tremenda muela» cuando alguien está hablando mucho. «Está en talla» cuando algo o alguien está bien o dice algo cierto. «Sirvió o boláo», como expresión de «está bien, vamos a hacerlo». «Más rollo que película» cuando alguien aparenta más de lo que realmente es. «Coger un diez», que es descansar un momento. «Tú no me calculas» referido a «tú no me conoces». «Terminó como la fiesta del Guatao» para expresar que algo terminó de manera desastrosa. «No coger lucha», cuando no hay que preocuparse por nada. «Estar detrás del palo» para indicar que la persona no sabe las últimas noticias.
Para decir novio(a) utilizan muchas veces jeva(o) o jevito(a) si es como amigo-novio. Las frases y piropos cubanos para enamorar son muy ocurrentes y graciosos en ocasiones, como «¿crees en el amor a primera vista, o paso de nuevo?» Para las fiestas también hay diferentes jergas, pueden decir, pari, fetecún o descarga.
Frases que vienen de un ámbito específico
Hay frases que vienen de ámbitos comunes para los cubanos como el béisbol, deporte nacional. Incluso, se reconoce esta variación como una jerga específica en la lengua, que en Cuba ha llegado a cualquier sector del habla, más allá del beisbolero.
Por ejemplo, se utiliza «en tres y dos» para definir una situación difícil o extrema. «Tener la bola escondida» cuando alguien sabe algo pero no quiere decirlo hasta el momento preciso. «No hacer swing», cuando la persona que te interesa no te hace caso. «Fuera de liga (o estar escapao)» refiriéndose a alguien que sabe mucho o que ha hecho algo importante, «meter curva» cuando alguien da cualquier excusa para salirse de una situación. «Irse del parque» cuando una persona ha muerto. Aunque estos sólo son algunos ejemplos.
Los cubanos se caracterizan por sus ocurrencias e ironía en el habla. Por ello toman también nombres de animales para referirse a características de una persona: una «Cotorra» es una persona que habla mucho, un «mulo» es quien puede cargar grandes pesos, «bacalao» es una persona muy delgada, un «caballo» alguien con grandes habilidades y conocimientos sobre algo, etc.
También hay que tener en cuenta que muchas frases populares o vulgares se identifican con órganos sexuales y son muy utilizados con varios sentidos. La música popular urbana también ha influenciado el habla, particularmente de los jóvenes que utilizan expresiones de los cantantes de moda.
Conoce mejor a los cubanos y su lengua
Las ocurrencias y la gracia del cubano han cimentado frases y modismos de todo tipo, algunos ya asentados como cubanismos y otros que con el tiempo caerán en desuso. Los cubanos muchas veces también hablan muy rápido. Por eso, es importante estar atentos para evitar problemas y para finalmente poder mezclarse en su ámbito y conversar fluidamente. Entonces, «asere, vamo echando pa’ Cuba que es tremenda talla». ¿Entendió?
La mejor manera de conocer a los cubanos es sin duda haciendo una visita a sus tierras. ¡Reserva ya la tuya!