«Esta es la tierra más hermosa que ojos humanos vieran.»
Desde aquella conocidísima frase atribuida al almirante Cristóbal Colón, quien la soltó a los cuatro vientos cuando llegó a Cuba (que aún no se llamaba así), la idea de la Mayor de las Antillas como un paraíso surreal, mágico, ha seducido a numerosos viajeros.
Entre los embriagados por el entorno de ese país se encuentran ilustres profesionales de la imagen, como el gran fotorreportero Henri Cartier-Bresson y la cineasta y fotógrafa Agnes Vardá. Ellos legaron un valioso testimonio de los primeros años de la revolución de Fidel Castro a inicios de los 60, y las intensas transformaciones socioculturales de entonces.
El flujo de cazadores de imágenes asombrosas no ha cesado y en ocasiones esa fascinación deja hermosos resultados. Uno de los más recientes es la publicación del libro «Cuba. Al otro lado del espejo» (PhotoClub, 2017), del español José María Mellado.
Fotógrafo de altos quilates
Durante una década el fotógrafo nacido en Almería, José María Mellado, ha estado andando por La Habana y toda la isla. Regresa cada año para intentar aprehender con su cámara el alma de los cubanos, en una relación de amor con esa tierra maravillosa.
Él es un destacado conferencista y pedagogo, un referente para miles de fotógrafos debido a su método «Fotografía de Alta Calidad». Ha recibido más de cien premios y sus obras se guardan en importantes museos y colecciones, entre ellos el Museo Nacional Reina Sofía (España), el Borusan Contemporary Museum de Estambul (Turquía), el Artium (Museo Vasco de Arte Contemporáneo), y el Museo de Bellas Artes de Santander.
A Mellado lo representan galerías de Alemania, Bélgica, Turquía, Suiza, Francia y Panamá. Entre sus libros más celebrados están «Fotografía de Alta Calidad. Mis mejores técnicas y consejos», y «Fotografía de Alta Calidad. Los Fundamentos de la Fotografía». A esta lista se ha sumado una nueva publicación, que enfoca de otra manera a Cuba y su gente.
Cuba a través del espejo
En Cuba. Al otro lado del espejo, Mellado incluyó unas 150 fotografías agrupadas en capítulos, entre ellos «Ciudad capital», «Calles, palacios, columnas…», «El mar», «Las máquinas eternas» (sobre los coches antiguos), «En busca del milagro» (sobre la religión afrocubana) y «Pa Provincias».
El artista hace un guiño con el título de su libro, a la segunda parte de Alicia en el país de las maravillas. Él quiere desmontar con sus imágenes las ideas preconcebidas que suelen tener los turistas que se acercan a la isla. Su objetivo lo dijo al periódico El País, en enero:
«…enseñar qué hay detrás de ese espejo que te emociona y sorprende, sin tintes oficialistas ni ser un instrumento de denuncia, ese no es mi asunto.»
Para lograrlo viajó a Cuba unas veinte veces, y se llevó con su cámara aproximadamente 30 mil imágenes. El itinerario de Mellado se extendió por La Habana, Viñales, Matanzas, Cienfuegos, Santa Clara, Sancti Spíritus, Trinidad, Remedios, Las Tunas, Baracoa, Santiago de Cuba…
El libro cuenta con textos reflexivos sobre la obra de Mellado, escritos por el fotoperiodista Pablo Juliá, ex-director del Centro Andaluz de la Fotografía; del ex-cónsul de España en La Habana, Pablo Barrios Almanzor; y Nelson Ramírez de Arellano, director de la Fototeca de Cuba.
Imágenes reales y maravillosas
La pasión del fotógrafo por Cuba no tiene que ver con su luz que lo inunda todo, pues Mellado prefiere explotar la mala iluminación. El adora las imágenes cubanas porque:
«…es un país detenido en el tiempo, que te transporta a otra época con su belleza decadente.»
También ha dicho que la hospitalidad de su gente lo hace sentir todo más cercano, como si sus habitantes fueran primos lejanos, quienes acogen al visitante con gran humanidad.
Sus fotografías recogen con una riqueza cercana a lo pictórico los múltiples colores y formas de la arquitectura, los paisajes naturales y la gente de Cuba. Hay muchas fotos donde no existen personas o hay pocas, porque a él le interesa más la huella humana que los personajes.
Algunas son tan curiosas como esa de un grupo de jóvenes jugando fútbol en la piscina seca del emblemático edificio FOCSA, o tan sensuales como «Chevy azul y pareja bailando», la primera instantánea que tomara en 2006, a su llegada a La Habana.
El paisaje cubano no falta, miremos la hermosa foto «Árbol con nubes» (2011), lograda en la paradisíaca playa de Ancón, cercana a la ciudad patrimonial de Trinidad. Tampoco están ausentes algunas de las joyas de la arquitectura cubana, como el imponente Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso y el gigantesco puente de Bacunayagua, joya de la ingeniería civil cubana, un reto al abismo sobre el verde valle del Yumurí.
Hay ocres predominantes en edificios y calles, verdes y azules en los coches de las décadas del 40 y 50, llamativos carteles y vallas de propaganda política. En el libro predomina una atmósfera misteriosa y poética, como si se tratara de un escenario novelado, pero es una realidad bellamente representada por el artista.
Descubrir Cuba junto a un mago de la fotografía
El libro de José María Mellado permite conocer ese país y a su gente, gracias a su sensible y particular idea del reportaje fotográfico. La Mayor de las Antillas también es uno de los sitios escogidos por él para ofrecer sus masterclass, donde quienes se inscriban para viajar a Cuba en diciembre de este año conocerán paisajes de la Habana, Trinidad, entornos de gran riqueza cromática, dispares y sorprendentes.
Mellado revela una Cuba distinta a la que comúnmente inunda los medios de comunicación. Indudablemente su obra es la de un enamorado de esa tierra, y esto se evidencia en «Luna sobre La Habana», la bella foto que cierra su libro más reciente y que ya tiene un éxito indudable.