Calles de La Habana Vieja con denominación religiosa

Calles de La Habana Vieja con denominación religiosa

Cuba es una mezcla de razas, tradiciones y costumbres provenientes de sus aborígenes, España y África. Tan es así que actualmente la isla antillana muestra un amplio y heterogéneo universo religioso, en el que sus moradores manifiestan disímiles creencias.

No obstante, durante la formación de la nacionalidad cubana no puede minimizarse la influencia del país conquistador. Es así que su fe, la católica, marcó gran parte de su historia.

Cuatro calles de la habana vieja con nombres religiosos

Al visitar La Habana Vieja, podrá constatar lo anteriormente expresado en las numerosas iglesias y arterias cuyas denominaciones se relacionan con el catolicismo. Descubra aquí la historia y los atractivos en las calles Cristo, Jesús María, Merced y Obispo.

  • Calle Cristo

    Curiosamente esta vía solo tiene una cuadra, que se extiende desde Teniente Rey hasta Muralla y conduce a la plaza e iglesia de las cuales, se dice que tomó su nombre.

    Fachada de la Iglesia del Cristo del Buen Viaje

    Si desea hospedarse en la parte más antigua de La Habana, la calle Cristo es la opción ideal, pues en ella abundan los hostales. Muchos la utilizan como vía de acceso a Teniente Rey y Muralla.

    Sin embargo, su mayor encanto es su cercanía a la Iglesia del Cristo del Buen Viaje y la Plaza del Cristo. Solo tiene que traspasarla, cruzar Teniente Rey y el propósito será cumplido.

    Construida en 1732, dicha iglesia fue muy concurrida desde siglos pasados debido a que los marineros antes de alzarse a la mar, y luego de su regreso, siempre acudían a ella pidiendo por una travesía marina exitosa o para agradecer por sus viajes sin tropiezos. De la misma se desprendió el nombre de la quinta plaza del Centro Histórico capitalino.

    La Iglesia del Santo Cristo del Buen Viaje y la plaza que toma su nombre

    La Plaza del Cristo incluye bancos, canteros, aceras, varias mesas de hormigón con tableros de ajedrez de cerámica, un busto en memoria al poeta cubano Gabriel de la Concepción Valdés, más conocido por Plácido, así como nuevos árboles que reverdecen el entorno. Desde allí, puede contactar con la vida diaria del cubano y conocer de cerca sus peculiaridades.

  • Calle Jesús María

    Se extiende desde Egido hasta la avenida del Puerto. Es atravesada por las arterias Curazao, Picota, Compostela, Habana, Damas, Cuba, San Ignacio.

    Uno de los tantos bicitaxis que abundan en el barrio de Jesus Maria

    Su nombre lo debe a Jesús, por Jesucristo, figura central del cristianismo, y a María, por Su madre. Recorrer Jesús María le permitirá contactar con las construcciones propias de los barrios de La Habana Vieja y descubrir algunos de sus encantos.

    Si inicia la travesía desde Egido, verá que muy cerca se encuentra la Terminal Nacional de Ferrocarriles y fragmentos de la Muralla, que siglos atrás dividía La Habana intramuros de la extramuros.

    A lo largo de Jesús María, no faltan los carretoneros. Es decir, una especie de puestos expendedores de frutas, vegetales, viandas, legumbres, colocadas sobre carretones y dispuestos en las esquinas de la calle.

    Vendedor ambulante recorre calles de la Habana

    Al pasar la esquina de la calle San Ignacio se encuentra el Restaurante Bar Jesús María que abre sus puertas al mediodía para cerrarlas a las 12:00 AM. La coctelería es inmejorable, matizada por el clásico Mojito, el Daiquirí, la Piña Colada, el Cuba Libre, la Michelada, entre otros.

    También puede optar por un sabroso café en sus diversas variantes, las populares frituras de malanga, berenjenas fritas con salmorejo, pescado grillé con verduras a la plancha, ropa vieja de cordero con plátano frito y la hamburguesa “Jesús María”; todas ofertas deliciosas, con precios razonables.

    Antes o después de almorzar o cenar en este sitio puede proseguir el recorrido en dirección a la Bahía de La Habana. Allí encontrará la emblemática Alameda de Paula, con sus bancos, farolas y la columna de mármol dedicada al que fuera Capitán General de Cuba, Leopoldo O’Donell. Desde allí la bahía habanera, con sus típicas embarcaciones, forma parte del entorno marítimo capitalino.

    Hermosa vista de la Alameda de Paula

    La Iglesia de Paula, declarada Monumento Nacional en 1944 y convertida, actualmente, en una excelente sala de concierto de música sacra, a través de una explanada, se une a la Alameda, de forma tal que invitan a descubrir los encantos de ambas. No lo dude, propóngase disfrutar del bello panorama colonial y portuario una vez que concluido el paseo por Jesús María.

  • Calle Merced

    Al igual que Jesús María, la calle Merced comienza en Egido y concluye en la Avenida del Puerto, a la vez que es atravesada por las mismas arterias. Recorrerla es una opción que bien vale la pena.

    Sin lugar a dudas, el atractivo más significativo de la calle Merced, radica en la Iglesia Nuestra Señora de la Merced o, simplemente, Iglesia de las Mercedes.

    Fachada de la iglesia Nuestra Senora de La Merc

    A ella llegará fácilmente, pues se ubica en la esquina de las calles Merced y Cuba. Al templo, que goza de gran popularidad, acuden tanto católicos como practicantes de la santería, quienes ven en su santa patrona, a Obatalá, el más poderoso de los orishas de la religión yoruba.

    La iglesia carece de campanario y de torre, sin embargo su interior es suntuoso. Según se dice, la Iglesia de las Mercedes llegó a convertirse, en la etapa republicana en el escenario de las bodas más importantes de la capital cubana.

    Pero si está interesado en el mundo religioso, muy cerca de la Iglesia de las Mercedes encontrará otros inmuebles relacionados con ese universo. Por ejemplo, la Iglesia de San Francisco de Paula (Iglesia de Paula), la del Espíritu Santo, la de Belén y el Convento de Santa Clara.

    Si continúa el tránsito por la calle Merced, entre Cuba y San Ignacio le espera un estupendo restaurante con una decoración y ofertas culinarias exquisitas.

    Se llama El Jíbaro, y ofrece sus servicios desde las 10:00 AM hasta las 11:00 PM. Además de su sabrosa comida cubana e internacional, se distingue por una coctelería analcohólica refrescante, a tono con el clima de la Mayor de las Antillas.

    Si opta por descubrir otros sitios interesantes, le dejo como recomendación que, una vez que visite la Iglesia de las Mercedes, siga el trayecto por la calle Cuba.

    Calle Cuba en el corazon de La Habana Vieja

    La Galería Casa Cuba 822 es un espacio que atrae a quienes pasan por su lado. Es una rareza dentro del entorno que circunda a la iglesia. Hallará una casa de alto puntal, con tres “faroles chinos” adornando su fachada.

    En el espacio de pared que se ubica entre la puerta y el ventanal con sus rejas de hierro, una pintura inmediatamente hará detener tu mirada. Representa una persona con micrófono en mano y su cabello está tapizado por numerosos discos de 45 rpm (revoluciones por minuto) de populares cantantes cubanos y extranjeros: Farah María, Oscar de León, José Luis Rodríguez (El Puma), Mocedades, Lolita

    Una vez dentro descubrirá los numerosos objetos que particularizan la edificación: pinturas que ilustran El Capitolio Nacional, rostros de mulatas, de Marilyn Monroe, Charles Chaplin; fotos de El Che y otros líderes revolucionarios cubanos, una bandera cubana, una vieja máquina de coser, todo ello creando un verdadero ambiente vintage. Dicho espacio sirve de escenario a la concurrida Peña Miguelito Valdés, un domingo al mes, de 5:00 a 8:00 PM.

    Continuar el paseo por la calle Cuba, le llevará, en pocas cuadras, a los Almacenes San José. Allí encontrará suvenires, objetos de madera y cerámica, abanicos, pinturasLos mejores recuerdos de La Habana en íntimo contacto con su bahía.

  • Calle Obispo

    Este es un referente de obligatoria visita para quienes desean conocer el Centro Histórico habanero. No por gusto se le considera la arteria más importante de esa zona capitalina.

    Calle Obispo

    Su origen data de varios siglos atrás, específicamente del XVI. Es por ello que muchos la consideran “tan vieja como La Habana”. Aunque se le ha llamado Consulado, calle de su Señoría Ilustrísima, San Juan, Weyler y Pi Margall, el nombre que ha perdurado hasta nuestros días es Obispo.

    Se inicia en la calle Monserrate, donde antiguamente existió una puerta de entrada a la ciudad desde los barrios de extramuros, y culmina en la Avenida del Puerto. La atraviesan las calles Bernaza, Villegas, Aguacate, Compostela, Habana, Aguiar, Cuba, San Ignacio, Mercaderes, Oficios y Baratillo.

    Actualmente Obispo es una calle peatonal, probablemente la más transitada de La Habana, que mantiene su sentido comercial. En ella encontrará de todo: comercios, librerías, parques, plazas, hoteles, bares, restaurantes y disímiles museos.

    Si decide comenzar desde Monserrate, encontrará dos sitios maravillosos. A la izquierda, la plazuela dedicada al ingeniero Francisco de Albear y Fernández; a la derecha, el famoso Bar Restaurante El Floridita, conocido como “La Cuna del Daiquirí”, donde Ernest Hemingway pasaba gran parte de su tiempo.

    Bar Floridita en la calle Obispo

    A solo unos pasos de El Floridita, se encuentra La Moderna Poesía, una de las librerías más importantes del país, pero esa no es la única en tan emblemática calle.

    Relojerías, tiendas de ropa, calzado y útiles del hogar, se sitúan a ambos lados de la calle; incluso, El Patio de los Artesanos, una de las ferias de suvenires de mayor popularidad en la capital cubana.

    El Hotel Ambos Mundos, en la esquina de las calles Obispo y Mercaderes, es un espacio muy visitado. Su inauguración se remonta al 1 de enero de 1925 y en él se hospedó durante mucho tiempo el Premio Nobel de Literatura de 1954, Ernest Hemingway. La habitación en la que vivió durante años se conserva con carácter museable y en ella se dice que gestó parte de su reconocida novela “Por quién doblan las campanas”. No deje de visitar la azotea cuya vista de la bahía es impresionante.

    Hotel Ambos Mundos en la centrica calle Obispo

    Muy cerca de él se ubican la Plaza de Armas y El Templete, sitio fundacional de La Habana; el Castillo de la Real Fuerza y el Palacio de los Capitanes Generales, hoy Museo de la Ciudad, sitios donde desemboca la calle Obispo. Muy cerca existen otros museos como el de la Farmacia, el Numismático y el de la Orfebrería.

    Espacios donde degustar sabrosos desayunos, meriendas, almuerzos, y cenas, están por doquier en el trayecto de Obispo. Muchas de ellos, amenizados por pequeños conjuntos de música tradicional cubana. Una buena oportunidad para, de vez en cuando, echar unos pasillitos al compás de la inigualable música de esa isla caribeña.

No lo deje para después

Así mismo, las calles Cristo, Jesús María, Merced y Obispo, esperan por ser visitadas. Seleccione cada una y trace la ruta para descubrir maravillas dispersas por la añeja zona.

Solo tiene que proponerse recorrerlas y descubrir en cada lugar de esas calles, su origen o historia, estrechamente ligada a la fe religiosa de una ciudad que ya celebra sus primeros 500 años.

Etiquetas
Calles, Colonial, Ideas, Iglesias, La Habana, Lugares, Religión, Restaurantes, Rutas, Vacaciones