Para aquellos que disfrutan el paseo por las calles de La Habana Vieja y el encuentro con todos los proyectos culturales y contemporáneos que estas ofrecen, se inauguró en diciembre de 2009 un centro de exposiciones para el arte cubano actual: Factoría Habana.
Es un proyecto dirigido por la galerista española Concha Fontenla y adscrito a la Oficina del Historiador de la Ciudad. Abre de lunes a sábados de 09:30 de la mañana a 5:00 de la tarde y se ubica en el número 308 de la calle O´Reilly, entre Habana y Aguiar.
Una curadora premiada como guía
Concha Fontenla, al frente del proyecto desde su nacimiento, es Doctora en Historia del Arte por la Universidad de Santiago de Compostela, y ha sido asesora técnica del doctor Eusebio Leal, en materia de restauración arquitectónica en el Plan Maestro de la Ciudad.
Ha sido reconocida por su labor como curadora y galerista en la Mayor de las Antillas, con el prestigioso Premio Nacional de Curadoría de Cuba, otorgado por el Consejo Nacional de las Artes Plásticas (CNAP) en 2017.
Espacio en diálogo con su historia constructiva
Factoría Habana funciona como espacio para el diálogo intercultural e interdisciplinar y motiva la creación artística contemporánea desde nuevas búsquedas formales y conceptuales.
El proyecto se enclava en un edificio que, en el pasado, fue la sede de Talabartería Habanera, un centro en el que se gestionaba el comercio exterior de productos en cuero realizados en Cuba.
Es por tanto un espacio histórico, pero a la par muy contemporáneo en su arquitectura industrial y un tanto ecléctica, que fue reparado y restaurado a fin de albergar a este proyecto de galería.
La institución partió entonces del concepto de fábrica, o factoría, por una parte en diálogo con el espacio pero también vinculándose a la idea de producir y promover un arte que fuera experimental. A la vez es novedoso, en forma y conceptos, en constante diálogo con especialistas de diversas esferas, curadores, críticos, arquitectos, diseñadores, artistas aficionados, estudiantes y todos los interesados en temas de arte, pues el público general es considerado el destinatario más importante de esta propuesta.
¿Qué ver en Factoría Habana?
Allí las exposiciones se renuevan alrededor de tres veces a lo largo del año. El espacio expone así, de manera transitoria propuestas experimentales, y vanguardistas, que abren nuevos caminos de producción artística y apuestan por el uso de diversos lenguajes plásticos.
A lo largo de estos años han exhibido sus obras, en él, creadores jóvenes, pero también otros consolidados, como Eduardo Ponjuán, Belkis Ayón, Rocío García, René Francisco, Carlos Montes de Oca, Pedro Pablo Oliva, y Roberto Fabelo, por solo citar a algunos.
Factoría Habana promueve la experimentación con nuevas tecnologías sensoriales y sonoras, abriendo espacio también al arte urbano, el performance y el diseño industrial. Los artistas a menudo hacen un uso creativo de pisos, paredes y techos, a través de instalaciones o muestras de arte efímero.
Particularmente exponen artistas cubanos, pero además se incluyen propuestas del panorama internacional. En mayo de 2016, por ejemplo, se mostró la obra fotográfica del director creativo de la casa de modas Chanel, Karl Lagerfeld “Obra en proceso/Work in Progress”, donde el célebre diseñador exhibió varias fuentes importantes de inspiración para su obra: la moda, la arquitectura y el paisaje.
Impacto en la comunidad
Es este un proyecto que incide sobre la comunidad donde se desarrolla. Se inserta en el entorno sociocultural y acciona en este al promover una experiencia que es también educativa. Para lograrlo tiene entre sus objetivos elevar el nivel de creatividad y conocimiento de quienes se acercan a Factoría Habana.
Como parte de esa experiencia promueve conferencias, talleres, presentación de audiovisuales, laboratorios de ideas, donde se debaten temas vinculados a las exposiciones, así como el otorgamiento también de becas de creación, que estimulan el quehacer artístico en la ciudad de La Habana.
Factoría Habana en un entorno de lujo
Cerca de esta institución se ubican otros sitios que complementan de maravilla un recorrido por el centro histórico. Por ejemplo, el Museo de la Revolución, el Numismático, el de la Farmacia Habanera, y la Catedral de La Habana.
A su alrededor hay numerosos sitios donde hospedarse, ya sea casa de renta y hoteles como el Telégrafo, Parque Central y Sevilla.
Y en cuanto a bares se refiere, muy cerca de la Factoría se erige el Bar-Restaurante O´Reilly 304. Además resultan también cercanos, el Floridita y La Bodeguita del Medio, dos espacios emblemáticos de la gastronomía cubana.
Paralela a la vía en que se erige la Factoría se encuentra también la calle Obispo, una de las más recorridas de la ciudad, en ella se ubica un gran número de comercios, característica que la hace sumamente agitada y digna de transitar.
A la espera de la Bienal, Factoría Habana aguarda su visita
Hoy Factoría Habana se prepara para participar en la ya próxima Bienal de La Habana. Es este, sin dudas, uno de los espacios frecuentados del circuito cultural capitalino, en tanto deviene un centro de referencia para el acercamiento a la sensorialidad más actual e inmediata, en lo que al arte contemporáneo se refiere.