España en la cocina cubana

España en la cocina cubana

Es cierto que la naturaleza ha favorecido a la cocina cubana. El espléndido clima subtropical de la isla favorece la producción de frutas como la naranja, la piña, la guayaba; granos como el café; plantas como la caña de azúcar y hojas aromáticas como el tabaco, siendo considerado el que allí se cultiva uno de los mejores del mundo.

Todos estos productos nutren una gastronomía autóctona y suculenta, en la cual todavía quedan rastros de las comidas aborígenesde las culturas africana, la china y esencialmente la española.

Sazón hispano

Plato de comida tipica cubana

La influencia de otras culturas como la africana, china, la francesa (sobre todo en su repostería), la yucateca, la haitiana, la jamaicana y la norteamericana, también está presente en la cocina cubana. No obstante, a pesar del amplio desarrollo de la cultura culinaria en el país, y sus múltiples referencias, siguen siendo los platos de origen español los que más predominan y se disfrutan en Cuba.

El casabe o pan de la tierra de los indígenas cubanos comenzó a comerse acompañando los primeros guisos españoles en el Nuevo Mundo, a los que se le añadió ají picante, carne de jutía, diferentes pescados, aves y viandas, dando paso al tradicional ajiaco. Este fue el inicio de un proceso de transculturación que se reflejó en todos los ámbitos socioculturales, económicos y específicamente en la gastronomía nacional. Un poco más avanzada la colonización, el casabe cedió terreno ante el pan de trigo que debía importarse de España.

Un guiso cubano listo para ser degustado en una paladar habanera

De la metrópoli traen también el arroz, las aves de corral, las carnes saladas, los huevos, la harina de trigo, el aceite de oliva, el vino, el ganado, diversas especias y condimentos. Junto a este aporte llegan las galletas, el pan y los dulces.

Restaurantes habaneros con platos tradicionales de España

Una seccion del menu del restaurante La Cocina de Esteban

Uno de los principales restaurantes de La Habana, si de comida mediterránea se trata, es La cocina de Esteban, ubicado a solo una cuadra de la famosa heladería Coppelia y del Cine Yara. Allí se pueden encontrar deliciosos platos de la gastronomía típica española, italiana y cubana. Su chef es Esteban Coco, un madrileño enamorado de Cuba.

Entre las especialidades de la casa están el filete de pescado y la langosta grillada. Otro de los platos principales es la ensalada Finca Marta, el cual es preparado con las verduras orgánicas cultivadas en una hacienda de las afueras de la ciudad. El restaurante también cuenta con un bar dedicado al fútbol con camisetas de jugadores de diversos equipos, especialmente del Barca y Real Madrid.

En el hermoso Reparto Miramar está el Restaurante Toros y Tapas. Este atractivo espacio se reconoce por la excelencia en el servicio y la mezcla en sus platos de elementos de la cocina tradicional española con las tendencias modernas, adoptando elementos caribeños. Ofrece servicio a la carta de la cocina española.

Acogedor espacio interior del restaurante Toros y Tapas

Las especialidades de la casa son las Paellas y las Tapas españolas como el Cochinillo a la segoviana y Paletilla de cordero Lechal. Cuenta con un bar con carta de vinos y bebidas al gusto.

Entrada del restaurante habanero La Barraquita

También en el Vedado, justo en la céntrica esquina de 19 y 12, se encuentra otro digno exponente de la mejor gastronomía valenciana de todos los tiempos: La Barraquita de La Habana. El restaurante hace alusión a la barraca, construcción de los campesinos de la huerta de esa región española. Además de disfrutar de deliciosos platos típicos de dicha región mediterránea, también se pueden organizar allí eventos de negocios, fiestas privadas, o citas íntimas, las cuales suelen acomodarse en una maravillosa terrazaque tiene el restaurante.

La Casa Española: el top de la gastronomía ibérica en Cuba

Mesa reservada por clientes de una paladar habanera

También en el elegante barrio Miramar, se erige un edificio que se distingue por su arquitectura medieval, con sus torres y almenas presidiendo los jardines. En el inmueble se halla el restaurante Casa Española (Avenida 7ma, Esquina a 26), en la que fuera la mansión de Gustavo Gutiérrez y Sánchez, un ministro del dictador Fulgencio Batista.

Esa mansión ha cobrado nueva vida como restaurante de temática española, dedicado a Miguel de Cervantes y a su obra Don Quijote de la Mancha. Es uno de esos lugares donde parece que el tiempo se haya detenido años atrás. El interior está decorado con armaduras toledanas, lámparas de araña, faroles realizados en hierro forjado, tapices, muebles castellanos de madera y vitrales con figuras alegóricas.

El restaurante es un referente de la gastronomía popular española en La Habana. Casa Española ofrece unos platos elaborados a base de productos frescos, que enlazan la cocina del sur de Europa con pinceladas de sabores cubanos.

Plato de ensalada con mariscos acompanado del tradicional mojito en un restaurante de La Habana

Se ofrece un menú variado y de calidad, con deliciosos filetes y mariscos, gazpacho, garbanzos fritos, el bacalao al pil-pil, la caldereta de marisco, el arroz negro con calamares y ali-oli o el lomo de cerdo al Jerez.

El minucioso viaje a los orígenes de la gastronomía ibérica, nos trae de vuelta una espectacular tortilla de patata, un solomillo de cerdo al Jerez que conquista y una paella sublime.

España en la cocina de Cuba

Un plato de arroz blanco en la mesa junto al resto del menu

Si a los cubanos no les puede faltar en la mesa un plato de arroz, eso se debe a los españoles. También la preponderancia del cerdo en la gastronomía típica, o esos potajes de frijoles y sopas espesas; los guisos y la salsa criolla bien condimentada con comino, pimentón, laurel, orégano, ajo, cebolla y ají, mezcla de especies de un lado y otro.

Dos muchachas conversan y beben en una terraza de La Habana

Hasta la bebida de sobremesa cada vez más recuerda la herencia española, pues el vino hispano se está posicionando a la misma altura de la cerveza, tan gustada por los cubanos. Igualmente, las tapas alcanzan renovada popularidad. No hay como entrar a uno de los bares de moda en La Habana y tomarse, una tarde, un bocado de tapas con un buen tinto.

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